La Biblia Habla
¡Hola hola!
Una pregunta: ¿Eres feliz? ¿Estás feliz? Tu respuesta puede ser sí o no o depende de…
La Biblia, la Palabra de Dios, nos da respuestas eternas, respuestas que son verdaderas todo el tiempo para los niños, para los jóvenes, para los adultos.
Puedes ser feliz, feliz, si recibes una recompensa porque hiciste un esfuerzo, eso es cierto; pero otra vez, todavía te esfuerzas, en el deporte, por ejemplo, y no recibes ninguna recompensa. Entonces crees que no es justo.
Las recompensas de la vida en la Tierra no son realmente como las recompensas que recibes de Dios por la Vida Eterna.
Un día Jesús habló a una gran multitud diciéndoles cómo ser verdaderamente felices, siempre felices. En el Evangelio de Mateo capítulo 5, versículos 1 al 9…
Él les dijo: – Vosotros sois verdaderamente felices si escucháis la Palabra de Dios y si la guardáis.
– Eres verdaderamente feliz si tienes un corazón puro donde ya no hay lugar para el mal.
– Eres verdaderamente feliz si amas la justicia, la verdadera justicia, la de Dios.
– Sois verdaderamente felices si hacéis todo por la Paz, la de los hombres y especialmente la de Dios.
E incluso: – Serás feliz si la gente se burla de ti por mi culpa.
Esta última palabra de Jesús es más difícil de entender, pero también es cierta.
Sí, la meta de Dios es que seas feliz, aunque haya dificultades de todo tipo.
En el Salmo 1 está escrito: “Bienaventurados los que no andan en consejo de malos… los que no se quedan con los escarnecedores… sino que encuentran su gozo en la Palabra de Dios”.»
La alegría que supera todos los problemas es saber, tener la certeza y la certeza, de que Dios os ama y os amará siempre. Es saber que Él estará contigo todos los días desde que lo prometió.
Jesús vino a transformar nuestros corazones, a purificarlos gracias a la sangre que derramó en una cruz… por amor a cada uno de nosotros.
Y, ¿Sabes por qué? Porque Dios ha planeado una magnífica Casa en el Cielo para todos aquellos que han elegido aceptar vivir con Él, ya en la Tierra.